A las cinco de la tarde
sentí que se rompió un sueño,
supe lo que es ser de abajo,
supe lo que es estar lejos.
A las cinco de la tarde
cuando no hubo palabras,
cuando fue todo tristeza
fue la hora más amarga.
Lloré y sufrí con tu nombre,
a las cinco de la tarde,
descendí hasta los infiernos,
me acordé de los cobardes.
A mis cinco de la tarde,
le faltó tan poco y tanto,
a mis cinco de la tarde,
te incluí en mi diccionario.
Palabra cruel desalmada,
llena de odio y de carne,
te prometo que si vuelvo,
vuelvo con toda mi sangre.
Vuelvo como vuelve el Fénix,
que se levanta del fuego,
que vuelvo a ser lo que fuimos,
con River hasta mi entierro.
A las cinco de la tarde los vi llorar la derrota, esa que no provocamos pero que sin lugar a dudas nos pertenece. Porque cada vez que un hincha ve perder a su equipo la impotencia y la angustia se te instala en el pecho, te ahoga, te paraliza, te enfurece y te oscurece el manana. Esta es una batalla diferente queridos millonarios..... la primera A es un camino de pronto regreso. Fdo. Una cuerva que ya paso por esto
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