jueves, 17 de febrero de 2011

Ser

Quiero ser el humo de tu boca,
quiero ser el licor de tu copa,
quiero ser la arruga de tu ropa,
el hielo de tu Coca, quiero ser...

Quiero ser el bucle de tu pelo,
quiero ser el ala de tu vuelo,
quiero ser la tierra de tu suelo,
la nube de tu cielo, quiero ser...

Quiero ser el Sol de tu universo,
quiero ser la rima de tu verso,
quiero ser la firma en el anverso,
la dosis de refuerzo, quiero ser...

Quiero ser el nombre en tu cuaderno,
quiero ser el diablo de tu averno,
quiero ser la tuerca de tu perno,
la tilde de tu acento, quiero ser...

Quiero ser de ti o no ser de nadie,
quiero ser la pasta de tu caries,
quiero ser la barra de tus bares,
tu manojo de llaves, quiero ser...

Quiero ser servicio a tu cuarto,
quiero ser el canto del canario,
quiero ser la fecha'el calendario,
el vicio de tus labios, quiero ser...

Y quiero ser quien quieras que te quiera,
quiero ser el frasco en tu heladera,
quiero ser color en tu acuarela,
la misma Luna llena, quiero ser...

Quiero ser.

miércoles, 9 de febrero de 2011

Me gusta, cuánto me gusta.

Me gusta el contrapunto
que a mis costillas le marca tu pecho.
Me gusta tu ropa en el piso,
me gustan las charlas
que interrumpes con besos.
Me gusta el chaleco antifracaso
que me das cuando me pongo tus abrazos.
Me gusta más mi nombre en tu boca,
me gusta tu piel, su perfume que toca.
Me gusta olvidarte, encontrarte de nuevo,
hallarme en tu risa, perderme de miedo.
Me gustan las curvas de tu oído,
el andar de tu pelo.
Me gustas como a Neruda,
cuando callas, o lejos.
Me gustas de cerca, o el sabor del reflejo
que te ve maquillarte frente a los espejos.
Me gusta gustarte en mis momentos malos,
que cuando llegan los buenos,
siempre es a tu lado.
Me gusta encontrarle a la vida otra rima,
porque me gustas debajo,
y me encantas encima.
Me gustan tus pasos besando adoquines,
me gustan tus labios, tus ojos sin rimel.
Me gustan las calles que tu caminas,
me gustan tus piernas, que simulan vías.
Me gusta el concierto que das cuando duermes,
me gustan tus manos, tus comisuras,
me gusta saber que sonríes a oscuras.
Me gustan los puentes que tienes por cejas,
me gustan tus uñas golpeando la mesa.
Me gusta la frase que dices al irte:
"volveré temprano, no te quedes triste".
Me gusta, ¡ay! cuánto me gusta,
que me pintes soles en días de lluvia,
que me desates nudos usando los dedos,
que me alegres la vida con medio "te quiero".

domingo, 30 de enero de 2011

Sepan disculpar

Hoy me desperté con ganas de escribir una rumbita bien al estilo Barcelona.
Y bueno, cajón de por medio, se me prendió la lamparita y aproveché para hacerme cargo de un par de cosas, y para disimular algunas otras...


Espero sepan disculpar
los compañeros del bar
mis arranques de locura
cuando soy puerto sin mar,
y se amontona el pasado
y queda poco por contar,
y se me acaban los dedos
y la suma sale mal.

Espero sepan disculpar,
y disculpe usted también
que tropiece veinte veces
con las piedras del ayer,
y que no salga rumbita,
ni algo estilo Luis Miguel,
"son las cosas de la vida,
son las cosas del querer".

Que disculpe mi conciencia
todo lo que le entregué,
pa' que lleve por la vida,
no la se tratar muy bien.
Y vamos de bar en peor,
con caprichos de campeón,
es la cuenta de destino,
esa que la pague Dios.

Discúlpeme el cura,
no se que me sucedió,
si yo soy bien memorioso,
pero en esa confesión
me olvidé un par de pecados,
los que el juez me recordó,
y qué le vamos a hacer,
dos y dos no suman seis.

Sepan disculparme,
antes de que me despida,
por hablar demasiado,
por las dudas y las rimas.
Disculpen, ya que estamos,
los ataques de alegría,
las anecdotas cachondas
en las noches medio frías.

Discúlpenme todos,
que me retire temprano,
es que tengo una cita
en la mesa de aquí al lado,
si, la de esa señorita
que no está acompañada.
si la suerte me sonríe,
a casa llego mañana.

sábado, 29 de enero de 2011

Lugares (a lo Drexler)

Ocupa el cierre un lugar en el vestido,
así como el botón en la manga del abrigo.

Ocupan mi atención dos relieves en tu blusa,
ocupan mis poemas las puteadas de las musas.

Ocupan (ocupadas) mi cajón las polillas,
ocupan mis desvelos ceniceros y colillas.

Ocupan mi cabeza los libritos y canciones,
ocupan confesiones mis trasnoches y licores.

Ocupa una rubia un lugar en mi cabeza,
ocupa un real envido mi costado de la mesa.

Ocupan las hormigas los bancos de la plaza,
ocupan cucarachas la cocina de mi casa.

Ocupa el ajedrez un peón y un "jaque mate",
ocupa mi esternón este corazón que late.

Ocupa mi almohada una chica de visita,
ocupa mi mesa "otra ronda, ¿y quién invita?"

Ocupa la pizza derretida mozzarella,
ocupa un conejo el interior de mi galera.

Ocupan mis pies estas rotas zapatillas,
ocupan chinchulines y mollejas la parrilla.

Ocupan la playa la arena y los bikinis,
ocupan las barras los tequilas y daikiris.

Ocupa la yerba el lugar de la bombilla,
ocupa tu beso un lugar en mi mejilla.

miércoles, 5 de enero de 2011

A Federico García Lorca, por tanto...

Dedicado a mi poeta preferido, una de mis más grandes fuentes de inspiración, y aspiración...

Pintando poesía

Dalí pintaba dormido
entresoñando despierto,
con Gala y con Federico,
de Buñuel el descontento.

Cuentan los históricos chismes
que en los fervorosos veinte,
en la residencia española
ardían cabezas y vientres.

Dando odas el granadino,
hacía suspirar pinceladas
al artista que en el lienzo
a su inconciente plasmaba.

Regañándolo a García,
tras leer su romancero,
le dijo aquel del bigote
curvado a base de huevo:

Deja de escribir romances,
que tu también eres genio,
y ahora es el surrealismo,
de la genialidad el movimiento.

Quedó como resultado
de tan magnifico acierto,
poetas en "nuevayores"
y un Federico sediento.

Sudando tinta en papeles,
rimando sueños con verbos,
da lugar al consejo
de aquel Dalí descontento.

La guerra civil derrumba
aquel amor de intelectos,
Rivera era casi un Primo,
pero primó el desconsuelo.

Una fosa común hoy guarda,
perdido allí por Granada,
al poeta ese que un día,
cuando sonaron las armas,

se declaró hermano del mundo,
se declaró amante del alma,
y con tres balas no pueden
acallar tales palabras.

Por "maricón" condenado,
dueño de prosa inimitable,
hizo llorar a la viuda,
a la novia y a la madre.

Hizo llorar a Dalí,
hizo lo que no hizo nadie,
conmovió a la roca viva,
hizo escultura un semblante.

Su real surrealismo
travieso amparo de risa,
con su cabello a dos aguas,
y por pluma una caricia.

Que se muera la muerte, Lorca,
la que te llevó ese día,
que se case Bernarda Alba,
y el ramo es para Rosita.

jueves, 16 de diciembre de 2010

De esperas y peluquerías

Un año y medio sin pisar una peluquería, pero me descubrí acompañante de mi hermano.
"Dejá, te espero afuera" le dije, y mientras tanto la avenida me contó un par de secretos.
Porque esperar y ver la calle, los autos, la gente, a veces es buena inspiración, acá traigo un retazo de los pensamientos que se me cruzaron la otra tarde, mientras esperaba.

Vida

Se apilan los versos,
y los vasos y los besos,
en la mesa de la vida
que vacía ceniceros.

Se apiñan los recuerdos,
y las cosas que vendrán
hacen fila en la memoria
para ver quién pega más.

Terminan las historias,
y hay quien dice que está bien
andar con pocas valijas
cuando hay que correr el tren.

Se hace tarde y la moneda
no ha dejado de girar,
es mejor ladrar dormido
que morder solo al soñar.

Y por las dudas no me guardo
el mejor beso pa' después,
que la muerte anda despacio
pero improvisar le sale bien.

lunes, 22 de noviembre de 2010

El precipicio de tu boca

Me crucé en tu mirada clara,
oí la luz del humo que te toca,
y decidí que en ese instante
saltaría al precipicio de tu boca.

Dejé en cada rincón de mi silencio,
las palabras que cayeron como gotas,
llené cien partituras con abrazos,
convertidos en acordes y en estrofas.

Puse fin a mi desvelo, tantas noches,
esperando cruzarte en algún sueño,
sentí quebrarse tu voz en la parada
mientras hablabas de tu amor y de su dueño.

Y me enteré de cuánto llanto,
puede habitar dentro de un puño de camisa,
y me aprendí la cruel lección de mi destino,
cuando no hallé tu corazón, solo tu risa.

Derrumbé planes, borré pisadas y sonrisas,
hice una tumba callada de mi vida,
porque supe que perderte era el camino,
y que el amor nunca será algo que se pida.

Sol, que se hizo Luna y se hizo estrellas,
te hablo de ésto que no es nada, pero pesa.
Te hablo de mi, con la garganta hecha un nudo,
te hablo de vos, te hablo de entrar en tu mundo.

Cuidando de no hablar, de no decírtelo todo,
de encontrar la forma, de preguntarte cómo.
Que intentes el olvido, y te olvides de olvidarme,
que quieras, y tal vez pida mucho, quizás amarme.

domingo, 21 de noviembre de 2010

Veranos, Verdades y Verona


Veraneamos una noche ahí en Verona,
me conseguiste la necesaria "casa sola",
me serviste la aventura hecha colchón,
me enseñaste qué hay detrás del esternón.

De Sahara el 102 a Montes de Oca,
de tu esquina de Barracas a La Boca.
Mis causas pérdidas y tus consejos,
mis cartas a Fliess, por mensaje de texto.

Reina ella, del ambo y del filoso bisturí,
me cosiste las heridas, me enseñaste a decidir.
Me tomaste el pulso, el tiempo y la mano,
no te vayas amiguinha, te lo pido, de mi lado.

sábado, 20 de noviembre de 2010

A la dama de Agosto


Mi caramelo de sonrisa y endorfina,
mi cable a tierra cuando voy a la deriva.
Mis indecisiones y mis aciertos,
mi fiel amiga y mi pretexto.

Mi fantasía, mi locura y mi rima,
abrazo fuerte a mi autoestima.
Mi charla de facultad y pasillo,
mi alumna del Edipo y cigarrillo.

Mi entereza y mi entrega,
mi amanecer en el mar,
mi poema y mi canción,
de ella estos versos y mi corazón.

jueves, 18 de noviembre de 2010

00:00

A la hora en que Cenicienta
perdía su zapato de cristal,
cuando párpados y persianas,
tienen lo mismo que contar.

A la hora en que la botella,
se baila un vals con el cordón,
y se refugia en su guarida,
tras la fuga algún ladrón.

A la hora en que las sonrisas
tienen gusto a ser de ayer,
y se reservan la alegría
los que se quieren sin querer.

A la hora en que el reloj
vuelve de nuevo a empezar,
y la poesía encuentra rima,
y el poeta su disfraz.

A la hora en que el canario
se ha cansado de cantar,
y planea la manera
de huir por ese ventanal.

A la hora en que las ganas,
tienden siempre a conjugar
los verbos más divertidos
con las ansias de sudar.

A la hora en que los versos
quieren decir la verdad,
y la Luna está dormida
y no se quiere despertar.

A la hora en que despierta
la acuarela del pintor,
y la realidad es sueño,
y se hace el perfume canción.

A la hora en que el inconciente
prende la última luz,
y el arrepentido no sufre,
y no pesa tanto su cruz.

A la hora en que el olvido
es la estrategia peor.
A la hora de acordarse
de preguntar ¿qué es mejor?

lunes, 8 de noviembre de 2010

Preguntale a tus amigos

Firmé el acta de defunción
de una historia de más de dos,
donde opinan tus amigos,
con muy poca precisión.

Que soy muy tierno para un rato,
que soy muy poco pa' después,
que no tengo alma de pirata,
que me he enganchado sin querer.

Que tengo pensamientos raros,
que hago encuestas sin parar,
que me gusta tomar del pico,
y que siempre me pega mal.

Que doy mil vueltas cuando explico,
que no me gusta esperar,
que no se viajar en subte,
y que me llama mi mamá.

Que no estoy para tu ritmo,
que soy más bajo, pa' variar,
que cuando te miro fijo,
se nota mucho, "hay algo más".

Que soy poeta eso lo admito,
que el amor fácil se me da,
que cuando te veo suspiro,
y que aún borracha me gustas.

Si te importa el "qué dirán",
más que lo que vos me ves,
hay muy poco para hablar,
mucho para componer.

Preguntale a tus amigos,
qué hago yo cuando no estás,
si te dicen que te extraño,
a lo mejor eso es verdad.

Poco o mucho igual te quiero,
pero es hora de guardar
los sentimientos en un frasco,
el corazón en el placar.

Entre letras se enterró
esta historia de más de dos,
cuando falten tus amigos,
dalo por hecho, yo no estoy.

viernes, 5 de noviembre de 2010

Se finì (rocanrol a manera de descargo)

Todo honesto sabinero
tiene siempre a esa Princesa,
una pena, una certeza,
una herida siempre abierta.

Es cuestión de hacer memoria,
hacerse mal es un placer
que no es para cualquiera,
que no es fácil de entender.

Yo queriendo armar futuro,
y vos armar uno de flores,
yo dándote mi vida toda,
y vos solo decepciones.

Yo enroscado a tus promesas,
vos queriéndolas creer,
yo perdiendo la cabeza,
el tiempo, el cuerpo y el deber.

Yo diciéndote "ya basta",
vos sin ganas de parar,
si el que sabe jugar limpio,
nunca sabe bien ganar.

Vos y tu as bajo la manga,
comodín de libertad,
que me perdone Sabina,
para mi eso es engañar.

No tenés lo que yo busco,
vos no lo sabés dar.
Yo te di lo que más pude,
no lo quisiste, da igual.

Vale más en la balanza
para mi y para mi amor,
el perderte que encontrarte,
el olvido que el perdón.

En tu cajón una reserva,
acompañante de salón,
se acabó lo que se daba,
como ahora esta canción.

martes, 26 de octubre de 2010

Reflexiones del 53

A veces necesito una pared,
para apoyarme cuando espero el colectivo
y mientras pienso en tantas cosas.
A veces subo al 53 lleno de gente,
y voy parado, y al mirar la ventanilla
veo el reflejo y reconozco en él algo de mi.
A veces estoy triste, y me molesta tanto
que me crean cuando digo que no sé por qué,
y la vida siga, y yo no tenga ganas de acompañarla.

A veces me da miedo estar solo,
y busco en la risa de los amigos, o en una historia,
ese abrazo que siento que me falta.
A veces me dan ganas de escribir otras cosas,
de tener canciones de amor para cantar,
de tener más que contestadores para hablar.
A veces me despierto,
y estoy más solo que la noche anterior,
y más acompañado que la noche después.

A veces me derrumbo de solo pensar en el pasado,
y no me reconozco como en el reflejo,
y agradezco al tiempo y a la vida por tal cambio.
A veces me da lástima dar lástima,
y pienso en escribir sobre abrazos de siempre,
y besos que se besan hoy en la esquina.
A veces me busco la fortuna que tengo,
a veces la suerte me encuentra,
y creo que a veces, sé como esquivarla.

A veces hago duelo por aquello que aún no perdí,
y me dan ganas de salir corriendo,
o de salir, solo salir.
A veces distingo una mirada distinta,
y me despierto con ganas de volver a mirarla,
pero descubro que no es más que un quizás.
A veces canto lo que escribo,
a veces escribo lo que canto,
a veces espero el próximo 53, solo para pensar.

viernes, 22 de octubre de 2010

Huele a huelga Buenos Aires

Huele a huelga Buenos Aires,
a pancarta, a agrupación y cacerola,
huele a toma Buenos Aires,
a estudiantazo, a asamblea, a humo de gomas.

Huele a lío Buenos Aires,
a protesta, sindicato, escudos, botas,
huele a tiros Buenos Aires,
a represión, persecución y mil pistolas.

Huele a diciembre Buenos Aires,
a indignación, a mentira y cossa nosstra.
huele a los noventa Buenos Aires,
a champagne, a nombramiento, a miedo y sombras.

Huele a gritos Buenos Aires,
a Congreso, a militancia y a banderas,
huele a desaparecidos Buenos Aires,
a grilletes, a esposas y cadenas.

Huele a basta Buenos Aires,
a nunca más, a victoria, a independencia,
huele a conflicto Buenos Aires,
huele a huelga.

sábado, 9 de octubre de 2010

Regresando a la poesía...

Para escribir estas estrofas le robe un verso a Sabina... espero sepa disculparme, como siempre.
El amor, a veces no duele tanto como el sentir que ya no duele...
Duele el desamor, pero cuando deja de doler, queda un espacio vacío, que es más difícil  de llenar que una cama, que un poema, que un espejo...

Lo peor de lo peor


Lo peor del amor cuando termina,
son las cualidades que se opacan.
El olor a nicotina en las cortinas,
el sabor a diez cafés de mis mañanas.
Los besos que me arrancan otras bocas,
las ciudades que me pintan otras almas.

Lo peor de las ausencias son las sombras,
o la oscura sensación del desencuentro.
El salir sin abrigo a las veredas,
y que duela más el frío que el silencio.
El encontrar mi corazón en la heladera,
el no esperarte más, al pie de la escalera.

Lo peor de lo peor no es no tenerte,
no es la silueta que dibuja en mi colchón alguna musa.
Lo peor de lo peor no es el espejo,
que se aburre tristemente por no verte.
Lo peor de lo mejor es que te busco,
con los ojos, con las manos, y en tu ausencia somos uno.